En este mundo tan agitado y tan rápido hay momentos en que quisiéramos que por arte de magia desapareciera el cansancio y la fátiga. Este fenómeno ha dado entrada a una serie de bebidas que prometen eliminar la sensación de agotamiento sin que estemos informados de los riesgos que existen al consumirlas.
Las bebidas energéticas son bebidas sin alcohol que contienen diversas sustancias estimulantes, básicamente taurina y cafeína, que ofrecen disminuir la fatiga, el agotamiento y proporcionar un incremento de la resistencia física.
Al ser bebidas que han estado relacionadas siempre con un aumento de la energía, el deporte, la resistencia, etc., se les ha vendido como bebidas “sanas”, mensaje que ha llegado directamente a un público muy joven e incluso adolescente con consecuencias no tan “sanas”.
A continuación enlistaremos los mitos y realidades de estas bebidas energéticas:
MITOS
- Aumentan la habilidad mental
- Son rehidratantes
- Es sólo un refresco o gaseosa
REALIDADES
- Crean dependencia física
- Eliminan la sensación de agotamiento (temporal)
- Contienen altas dosis de cafeína
- Muy peligroso mezclar con alcohol
La realidad es que consumir bebidas energéticas está relacionado con aumentar nuestro riesgo de sufrir diversos trastornos, especialmente si las mezclamos con alcohol. Esta costumbre, que ya hace unos años se extendió, sobre todo entre adolescentes y jóvenes, es especialmente peligrosa.
Hay que recordar que por sí mismas estas bebidas no contienen sustancias que proporcionen un verdadero contenido energético sino que, al ser una serie de sustancias combinadas, provocan una hiperestimulación del sistema nervioso, provocando signos como alerta, excitación, insomnio, ansiedad, entre otros.
Algunos de los síntomas que pueden presentarse al consumirlas son: elevación de la presión arterial, arritmias cardiacas y si existe un consumo excesivo se pueden llegar a presentar convulsiones, infartos y accidentes cerebrovasculares.
Si bien los expertos no recomiendan su consumo, existen sectores de la población que corren más riesgo al hacerlo: mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, niños y adolescentes, personas con patologías cardiacas o trastornos neurológicos, personas sensibles a la cafeína y personas que estén consumiendo algún tipo de medicamento.
A continuación compartimos con ustedes el documento "¿Qué dice la ciencia sobre las sustancias psicoactivas?" para que puedan revisarlo con detenimiento
Esperamos que esta información les sea de utilidad.
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Referencias:
Centro Bonanova (2018). Bebidas energéticas y sus peligros. Recuperado el 25 de septiembre de https://www.centrobonanova.com/bebidas-energeticas-y-sus-peligros/
Elika, Fundación Vasca para la Seguridad Agroalimentaria (2014). Riesgo del consumo de bebidas energéticas. Recuperado el 25 de septiembre de https://www.euskadi.eus/gobierno-vasco/contenidos/noticia/2014_07_03_20772/es_20772/20772.html
El País (2023). Las bebidas energizantes no dan alas. Recuperado el 25 de septiembre de https://elpais.com/salud-y-bienestar/nutrir-con-ciencia/2023-07-31/las-bebidas-energeticas-no-dan-alas-un-coctel-de-azucar-y-cafeina-con-riesgos-para-la-salud.html
Secretaría de Salud (2015). Los riesgos del consumo de bebidas energéticas. Recuperado el 25 de septiembre de https://www.gob.mx/salud/articulos/los-riesgos-del-consumo-de-bebidas-energeticas#:~:text=Cuando%20se%20mezclan%2C%20se%20pueden,convulsiones%2C%20infartos%20y%20accidentes%20cerebrovasculares.
Secretaría de Salud (2022). ¿Qué dice la ciencia de las sustancias psicoactivas? Recuperado el 25 de septiembre de https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/807269/Consumo_de_bebidas_energizantes_y_sus_implicaciones.pdf